El primer volumen de 33 La Serie, “Un hombre y su historia”, ayuda a los hombres a sanar las heridas de su pasado y avanzar en el viaje hacia la hombría auténtica siguiendo el modelo que Jesus trazó en sus 33 años en la tierra.
Sesión uno: Mirar hacia atrás
En esta sesión, se reta a los hombres a mirar hacia atrás sobre sus experiencias de vida para comprender cómo las personas y las experiencias de su pasado los han llevado al lugar en el que se encuentran actualmente. Al comprender y lidiar responsablemente con su pasado, pueden comenzar a disfrutar lo mejor de Dios para su futuro.
Sesión dos: Papá
En esta sesión, se les pide a los hombres que analicen detenidamente su relación, o la falta de relación, con su padre. Los hombres tienen el desafío de examinar honestamente cómo su padre ha moldeado su vida. La Sesión 4 (Sanidad) examinará cómo pueden encontrar la sanidad de cualquier herida infligida por su padre y avanzar hacia la resolución de estas heridas.
Sesión Tres: Mamá
En esta sesión, los hombres examinan su relación con su madre y cómo esta relación puede afectar su relación con su esposa o futura esposa. La sesión 4 (Sanidad) abordará las formas de encontrar la sanidad de cualquier problema de la madre que no se haya abordado.
Sesión cuatro: Sanidad
En esta sesión, se guía a los hombres a través de un proceso que puede ayudarlos a sanar una herida de su padre o de su madre. Esta sesión brinda pasos prácticos que pueden ayudar a restaurar la relación con papá o mamá. Estos pasos ayudarán mucho a los hombres a perdonar y seguir adelante.
Sesión cinco: Soledad
En esta sesión, los hombres están expuestos a los peligros de vivir la vida solos. Reciben instrucciones sobre cómo salir de su aislamiento y establecer relaciones honestas y abiertas con otros hombres que bendecirán y energizarán su vida.
Sesión Seis: Corazón
En esta sesión final, los hombres aprenderán la importancia de reconocer sus sentimientos, decir la verdad a sí mismos, a los demás y vivir verdaderamente desde el corazón. Solo a través de una relación de corazón con Jesucristo y con los demás, los hombres pueden experimentar una vida de verdad, pasión y propósito tal como fueron creados para vivir.